martes, 27 de diciembre de 2011

APTOS PARA LA SALVACIÓN

"Porque todo lo que es nacido de Dios vence al mundo; y esta es la victoria que ha vencido al mundo, nuestra fe". 1ª Juan 5: 4.
Dios conduce a su pueblo paso a paso. Coloca a sus seguidores en diferentes situaciones a fin de que se manifieste lo que hay en el corazón. Algunos soportan ciertas pruebas, pero fracasan en otras. A medida que se avanza en este proceso, el corazón es probado un poco más severamente. Si los que profesan ser hijos de Dios, encuentran que su corazón se opone a esta obra directa, deben convencerse de que tienen que hacer algo para vencer, si no quieren ser vomitados de la boca del Señor.
Dijo el ángel: "Dios irá probando cada vez más de cerca a cada uno de sus hijos". Algunos están dispuestos a aceptar un punto; pero cuando Dios los prueba en otro, lo rehuyen y retroceden, porque hiere directamente algún ídolo suyo. Así tienen oportunidad de ver lo que hay en su corazón que los aísla de Jesús. Hay algo que aprecian más que la verdad y su corazón no está preparado para recibir a Jesús. Los individuos son probados durante cierto tiempo para ver si quieren sacrificar sus ídolos y escuchar el consejo del Testigo fiel... Los que resisten en cada punto, que soportan cada prueba y vencen, a cualquier precio que sea, han escuchado el consejo del Testigo fiel y recibirán la lluvia tardía, y estarán preparados para la traslación.- Joyas de los testimonios, t. 1, pág. 65.
Dios prueba a su pueblo en este mundo. Este es el lugar donde hay que prepararse para comparecer ante él. Aquí, en este mundo, en estos últimos días, las personas pondrán en evidencia cuál es el poder que acepta sus corazones y controla sus acciones. Si es el poder de la verdad divina, conducirá a las buenas obras. Elevará al que lo recibe y lo transformará en una persona de corazón noble y generoso como su divino Señor. Pero si el corazón es controlado por los ángeles malignos, se demostrará en diversas maneras. El fruto consistirá en egoísmo, codicia, orgullo y pasiones bajas.
El corazón es engañoso más que todas las cosas, y desesperadamente perverso. Los maestros de religión no están dispuestos a examinarse cuidadosamente para ver si están en la fe; y es pavoroso descubrir que muchos se apoyan en una esperanza falsa... Parecen creer que una profesión de la verdad los salvará. Cuando subyuguen los pecados que Dios odia, Jesús vendrá y cenará con ellos y ellos con él. Entonces obtendrán fuerzas de parte de Jesús, y se desarrollarán con él y serán capaces de decir en santo triunfo: "Gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo" (1 Corintios 15: 57).- Testimonies, t. I, págs. 187,188.
Extraído del libro "Exaltad a Jesús" página 369